Diez tradiciones suizas para el patrimonio cultural de la UNESCO
El Patrimonio cultural inmaterial de la UNESCO tiene por objetivo proteger las tradiciones vivas y el saber hacer de las comunidades locales. En Suiza han obtenido este reconocimiento diez tradiciones. La Fiesta de los viticultores de Vevey fue la primera tradición que se inscribió en el Patrimonio cultural inmaterial, y el arte de construir con piedras en seco fue la última, en 2024.
2016: la Fiesta de los viticultores de Vevey entra en el registro
Este gran encuentro teatral, organizado por la Hermandad de los Viticultores de Vevey, celebra y pone en valor una parte imprescindible de la cultura regional: las labores vitícolas. Los festejos solo duraron un día en 1797, mientras que en la última edición se prolongaron durante dos semanas. La fiesta viticultora se organiza solo una vez por generación, siendo la última edición la celebrada en 2019.
2017: el Carnaval de Basilea
Este tradicional evento muy codificado tiene sus orígenes en la Edad Media. A partir de las cuatro horas de la madrugada, el «Morgestraich» (literalmente, “jugarreta matutina”) marca el inicio de las festividades el lunes después del Miércoles de Ceniza. Ataviados con disfraces y máscaras y equipados con linternas, los comparsas recorren a trancos las calles de Basilea aún sumidas en la oscuridad. Además de las representaciones musicales, el carnaval ofrece la oportunidad de caricaturizar los temas que marcaron la actualidad en el año transcurrido. Los grupos copleros del Schnitzelbank recitan poemas satíricos en las bodegas y los restaurantes de la ciudad.
2018: la gestión del riesgo de las avalanchas
La montaña y la nieve dominan la imagen de Suiza en el mundo. Se trata de un entorno que conlleva riesgos y que hubo que domar durante siglos para desarrollar el turismo en grandes altitudes. Este conocimiento, adquirido mediante la observación de la naturaleza, permite calcular los riesgos, mientras que la construcción de vallas protectoras o el desprendimiento artificial de avalanchas tratan de minimizarlos.
2019: las procesiones de Semana Santa en Mendrisio y el alpinismo
Durante la Semana Santa, el municipio de Mendrisio, en el Tesino, es el escenario de unas procesiones religiosas que se remontan a más de 350 años. En la tarde del Jueves Santo se apaga el alumbrado público de la villa para encender los maravillosos paneles de luz que ilustran episodios de la Biblia. Más de 600 figurantes vestidos con trajes de la época escenifican la Pasión de Cristo, desfilando por las calles de Mendrisio durante las procesiones del Jueves y Viernes Santo.
El alpinismo es el arte de ascender durante todo el año sobre terrenos rocosos y glaciares a las cumbres de la alta montaña; al mismo tiempo es un deporte que requiere competencias físicas, técnicas e intelectuales, así como material especial. Se basa sobre una cultura compartida que combina conocimientos ambientales, históricos y técnicos con valores como el respeto por la naturaleza y la solidaridad. Los clubes alpinos desempeñan un papel central al transmitir esta cultura a través de excursiones, publicaciones e intercambios internacionales.
2020: el saber hacer de la mecánica relojera y los talleres de cantería
Los relojes suizos constituyen algunos de los objetos más emblemáticos del país. La relojería es la seña de identidad de varias regiones suizas. Las habilidades manuales específicas de esta industria engloban técnicas y conocimientos que deben preservarse. La mecánica suiza también se distingue por la fabricación de autómatas y cajas de música, un sector que ha conservado su relevancia como artesanía fina en Sainte-Croix.
Los talleres de cantería de las catedrales o «Bauhütten», surgidos en la Edad Media, reagrupan varios gremios que colaboran en la construcción y restauración de los edificios. Estos talleres, organizados en redes suprarregionales, conservan las técnicas, las costumbres y las tradiciones transmitidas oralmente o por escrito. Estos talleres, que se recuperaron en los siglos XIX y XX, se consagran a la preservación, la transmisión y la innovación de las técnicas tradicionales. Colaboran con representantes de la política, la religión, la cultura y la ciencia y sirven como ejemplo para la gestión y la formación in situ, que pueden ser aplicadas en otros contextos de la construcción y el mantenimiento.
2023: la temporada del pastoreo alpino en Suiza y la irrigación natural
Cada verano, los ganaderos conducen sus rebaños a los pastos alpinos. Se trata de una forma de vida que se caracteriza por un cúmulo de técnicas y conocimientos adquiridos. Para pastorear el ganado y mantener los prados, los propietarios de las reses todavía se sirven de técnicas artesanales y ancestrales, a pesar de la creciente mecanización de la agricultura. Los eventos y las fiestas, que marcan el calendario de este modo de vida rural, despiertan la curiosidad y dan fe de la fuerza de las tradiciones en Suiza.
La irrigación tradicional se sustenta en la gravedad y se basa sobre infraestructuras artesanales que conducen el agua de manantial hacia los campos. Requiere un conocimiento pormenorizado del paisaje, de los flujos de agua y de las condiciones climáticas, y necesita la colaboración entre agricultores, terratenientes y cooperativas. Esta práctica, transmitida de manera informal o a través de las instituciones, está relacionada con las reuniones sociales, las fiestas y una terminología específica. Representa una seña de identidad y reúne conocimientos útiles en otros ámbitos de la vida comunitaria.
2024: el arte de construir con piedras en seco
El arte de construir con piedras en seco consiste en edificar sin argamasa, juntando cuidadosamente las piedras para que permanezcan estables y se adapten al terreno y al clima. Este arte requiere el dominio de la geometría y la física, así como competencias en el manejo de los materiales. Estas estructuras son marcas identitarias que dan valor a los paisajes locales. Como práctica social, este arte refuerza la cohesión social gracias a la colaboración y la transmisión intergeneracional.
